lunes, 23 de marzo de 2009

PRUEBAS DE LA EVOLUCION ( II )



Filogenia de los caballos.- El caballo actual tiene unas características muy definidas; su antecesor, del género Hyracotherium, tenía talla de liebre con una dentición adaptada a alimentarse de las hojas de los matorrales; sus extremidades tenían cinco dedos, cuatro normales y uno atrófico en las extremidades anteriores, y tres normales y dos atróficos en las posteriores. Tenían la región anterior del cráneo corta. Se pueden encontrar fósiles que enlazan perfectamente estos dos. Los primeros antecesores conocidos de los actuales caballos datan del Eoceno, hace unos 60 millones de años. Los caballos actuales se originaron en América y pasaron por la unión que existía entre Alaska y Siberia; se aclimataron luego en Europa y se extinguieron en América. Más tarde serían reintroducidos allí por los conquistadores españoles.



La explicación evolutiva de la ascendencia del caballo, además de demostrarnos lo evidente del proceso evolutivo por su ordenada sucesión de formas y caracteres, nos ofrece algunos indicios sobre los mecanismos que la han impulsado. Estos caracteres son respuestas selectivas para adaptarse a una serie de circunstancias, pero fundamentalmente a la alimentación a base de gramíneas y otros vegetales con un alto contenido en sílice. El cambio en el desarrollo evolutivo de los caballos afecta a tres caracteres: cambio en el aparato locomotor resultando en un sólo dedo; aumento general de la talla y alargamiento del cuello. Finalmente modificación de la dentadura con aparicion de piezas dentarias de gran tamaño preparadas para triturar las hierbas. Los tres principales caracteres que vemos modificarse a lo largo de este proceso presentan inequívocamente una serie de ventajas adaptativas. Por ejemplo, al ser animales que se alimentan de la hierba de los prados, necesitan conseguir un aumento de la velocidad para escapar de los posibles predadores. Esto lo logran al alargarse las extremidades, que se van a apoyar sobre un sólo dedo.



La evolución de la familia de los caballos ha venido siendo uno de los documentos clásicos de la evolución a partir de los estudios de Kovalewsky en 1874. Esta familia, desde la aparición de sus primeros representantes hasta hoy, comprende más de veinte géneros y un número muy considerable de especies. En la época de Kovalewsky sólo se estudiaron los fósiles europeos, los cuales presentaban una evolución que, aunque ordenada, daba saltos bruscos. Sólo el estudio de los fósiles americanos permitió más tarde reconocer que la evolución de las principales líneas había ocurrido en América y que las nuevas formas surgidas invadieron, en diversas épocas, el continente europeo.



(*) Arriba, a la izquierda, representación de la evolución del caballo. Según la publicación de E. Mayr: Animal species and evolution. Cambridge, 1963.


2 comentarios:

Loreto Wallace Moreno dijo...

Muy interesante. Hay alguna teoría que explique por qué se extinguieron los caballos en América, de donde eran originarios?.

Manuel Wallace Moreno dijo...

Bueno, la verdad es que esa misma pregunta se la hice yo al catedrático de la asignatura de Geología que nos explicó esta parte de la misma; lo que él me dijo es que todo apunta a que las glaciaciones empujaron a los caballos a atravesar el estrecho de Bering, y a través de las estepas asiáticas llegaron a Europa. Los que se quedaron allí se extinguieron porque no pudieron adaptarse a las condiciones medioambientales de Norteamérica, con un periodo glaciar que fue especialmente intenso en ese continente y se extendió hacia latitudes bastante bajas.